la tarde que conocí a Jessica Dismorr

Luciana fue quién me presentó a Jessica Dissmor. Fue una tarde que pasé por su casa en San Telmo y fuimos al chino a comprar cervezas. Ya borrachos y bien fumados, me propuso ir al Museo de Arte Moderno de avenida San Juan aprovechando que los Miércoles no cobran entrada. Fuimos caminando y discrepando en la contradicción de usar las palabras "museo" y "moderno" en una misma frase. 
Ya dentro, mirando una colección de obras de no sé quién, colgadas sobre un fondo rojo misionero, iluminadas por una (demasiado) tenue luz, fue que Luciana preguntó sin relación alguna. 
- ¿Conocés a Jessica Dissmor?
Ante mi negativa, me explicó que fue una pintora abstracta, inglesa. Que perteneció al vorticismo, un movimiento artístico influenciado por el futurismo y el cubismo. Me dijo estar muy obsesionada con ella y su obra. También me contó que Dismorr fue enfermera en la primera guerra mundial, y que se colgó en el 39, unos días antes de que Inglaterra le declare la guerra a Alemania. 
Mi amiga fue tan elocuente que me dio curiosidad su obra, y la busqué. Algunas pinturas me gustaron mucho, especialmente las más abstractas. 

Composición abstracta

Formas superpuestas

Formas relacionadas

Dos formas

Esa tarde terminó lisérgicamente, riéndonos como tontos por una confusión. En vez de decir "pintora abstracta" dijimos "abstracta pintora" y acá el orden sí altera el producto. Así que terminamos el día tratando de imaginar como sería una persona abstracta que, en el colmo, sea artista hiperrealista.

Autoretrato